Nico compra en el mercado algunas verduras frescas. Al final, él e Inge reciben un pequeño detalle del vendedor. ¡Así gusta comprar!

Inge y Nico cocinan juntos de nuevo y leen cuidadosamente la receta. Esta vez van a hacer pizza. ¿Les saldrá bien en esta ocasión?

En este capítulo veremos en qué manos cayó el bolso de Nico.

Dos hombres que viven en la calle encuentran el bolso de Nico y miran lo que pueden usar.

Lisa y Selma hablan sobre las vacaciones y el último viaje de Selma. Ambas no se dan cuenta que están pasando por delante del bolso de Nico.

Selma y Lisa hablan por teléfono. Lisa todavía está de vacaciones y disfruta del buen tiempo. Mientras hablan, Selma descubre algo que nadie esperaba.

Inge no está muy entusiasmada con la ropa de Nico. Pero, qué se le va hacer, si sus cosas están en su bolso desaparecido. Lo que Nico no sabe: el bolso aparecerá pronto.

Selma y Nico descubren que a pesar de que el teléfono móvil y el pasaporte de Nico están en el bolso, faltan dos piezas de ropa. Selma le propone ir a la ciudad y comprar ropa nueva.

Selma lleva a Nico de compras y encuentra varias vestimentas que le gustan para Nico. Los dos se llevan bien, tan bien que Selma le da a Nico su número de teléfono.

Nico llega a casa de Inge, la cual tiene una sorpresa para él. Ha buscado ropa que alguna vez perteneció a su difunto esposo. Nico se la prueba y... ¡mira lo que sucede!

Nico se ha llevado el monedero de Selma sin querer. Cuando Selma viene a buscarlo, parece que Nico entra en apuros.

El padre de Lisa investiga dónde está Yara. Preguntando a los amigos y buscando en la tienda de bicicletas, encuentran de repente información interesante...

Veamos lo que sucedió hace dos semanas, cuando Yara estaba en su tienda y recibe una llamada telefónica que la lleva a volar a Suiza.

Nico les cuenta a sus amigos sobre su hermano que vive en Munich. Ellos están algo sorprendidos de que tenga un hermano viviendo en Alemania, pero Nico no parece tan entusiasmado.

Los amigos están listos para salir a jugar al fútbol. ¡Tienen todo preparado, incluso un botiquín de primeros auxilios! Nunca se sabe quién se lastimará...