Lisa le pide ayuda a su padre, agente de policía, para encontrar a la tía de Nico.

Lisa lleva a Emma al cumpleaños de una amiga. En el coche, Nico y Emma juegan un juego para aprender los números.

Mientras Lisa conversa con la madre de la amiga de Emma, Nico espera en el coche y escucha algo muy interesante en la radio.

A Nico se le ocurre la gran idea de llamar a un programa de radio en directo para contarles de su bolso desaparecido.

Nico y Lisa van a la comisaría, donde el padre de Lisa registra la poca información que Nico puede darle.

Nico puede vivir durante los próximos días en la casa compartida de Lisa. Él se entiende bien con sus compañeros de piso, quienes están preparando una fiesta.

En la cocina, Nico muestra a Nina y Sebastian la foto de su tía Yara. A Sebastian se le ocurre una buena idea para averiguar la dirección de Yara.

Nico y los compañeros de piso piden pizza y descubren que alguien ha respondido en las redes sociales a la fotografía de la tienda de bicicletas de su tía.

En la cena con los compañeros de piso, Nico se entera del motivo de la fiesta que tiene lugar por la noche.

Nawin recibe en la fiesta muchos regalos: recuerdos de ciudades alemanas. Nico se muestra muy interesado, pero no puede dejar de pensar en su tía Yara.

Nico conoce a Selma, que es de Damasco, y aprende cómo se llaman las direcciones cardinales en alemán.

El grupo de amigos juega un juego con comida de diferentes países. Nico se entera de que Narwin ha conseguido un trabajo en Francia, pero parece que echará de menos Alemania.

Después de la fiesta, todos limpian juntos y hablan sobre los invitados y los idiomas que hablan. Además, Sebastian tiene una sorpresa.

Por la mañana en el piso compartido: Lisa tiene prisa porque tiene que ir a dar clases de alemán y no encuentra sus gafas, el libro y los lápices. Por la tarde está planeado ir a casa de Yara

Lisa es maestra de alemán y explica a sus estudiantes los diversos artículos en alemán. De repente aparece Nico.