El instructor Schmidt se toma muy en serio la protección del medio ambiente. En este vídeo nos lo demuestra estupendamente...

Melanie y Thomas van a comer. Aunque Melanie dice que no tiene mucha hambre, al final piden bastante comida ya que los platos de la carta suenan deliciosos.

Esta es la segunda parte de la disciplina olímpica "baile laosiano de la gallina". Ahora les toca a los chicos.

En la parte final del corto de cine "Horst", la cosa va al grano, pero no sin contratiempos y malas sorpresas.

La cosa se pone seria para Horst, ya que llega la hora de la cita con Maria. Primero a beber un trago para tener coraje.

Un extracto del corto "Horst": Al joven soltero Horst le piden un favor inusual.

Fred Timm, miembro de Monsters of Liedermaching, interpreta la canción: “Ich bin schlecht im Bett” (Soy malo en la cama) que dedica a sus grupis.

Siempre pasa lo mismo con estos conejos. En cuanto tienen un poco de dinero, se lo gastan enseguida.

¿Qué conejo no sueña en secreto con tener una tarjeta de crédito? En el año 2345 este sueño se hará realidad.

Lutz van der Horst visita la cumbre digital del gobierno federal y da rienda suelta a sus temores difusos.

¿Habrá un final feliz? El billete de cinco perdido reaparece, Schotty recibe un regalo sorprendente y la persona más honesta termina quedando como una delincuente.

Schotty paga su salchicha al curry con un billete de cinco euros muy especial, que resulta ser parte de una obra de arte muy cara de la galería...

En la conversación con la galerista, Schotty reconoce que la opinión propia puede estar influenciada en gran medida por la de los demás. También decide comprar el cuadro del señor Kirschelich para Merle, sin embargo, su precio ahora ha cambiado.

Schotty y la galerista discuten sobre la credibilidad y el valor de las obras de arte y los artistas. Observamos dos posiciones opuestas, pero al final, de alguna manera, parecen coincidir en una que otra opinión.

Somos testigos de una emocionante discusión sobre el arte y cómo se mide su valor. ¡Y vemos a Schotty fuera de sí!